Problemas de fontanería más comunes en Málaga y cómo solucionarlos rápido

En Málaga, con su clima cálido, las variaciones térmicas, la salinidad del aire en zonas costeras y la antigüedad de algunas instalaciones, los problemas de fontanería pueden surgir con frecuencia. Lo que para muchos es “un pequeño inconveniente” puede convertirse en un daño serio si no se actúa rápido. Aquí te contamos cuáles son los problemas más comunes, por qué ocurren y qué hacer para solucionarlos sin esperar que empeoren.

Principales problemas de fontanería en Málaga

Problema	Causas habituales	Cómo solucionarlo rápido
1. Fugas de agua	Juntas desgastadas, corrosión, grietas en tuberías, daños por raíces en tuberías enterradas.	Detecta la fuga (ruido, pared húmeda, mancha visible), cierra la llave de paso, reemplaza juntas o tubería dañada. Llama a un profesional si está empotrada o si la fuga es grande.
2. Atascos en desagües, fregaderos o bajantes	Acumulación de cabello, grasa, jabón, restos de comida. Suciedad en bajantes, hojas en exteriores, raíces.	Usa desatascadores manuales o químicos suaves al principio. Limpieza periódica. Para atascos persistentes, inspección con cámara, eliminación profesional del bloqueo.
3. Baja presión de agua	Sedimentos/minerales acumulados, aireadores o duchas obstruidos, tuberías mal dimensionadas o viejas, filtraciones ocultas.	Limpia aireadores/duchas, purga tuberías, verifica si hay fugas. Si persiste, conviene revisar instalación completa o la presión de servicio externa.
4. Problemas con calentador o termo (agua caliente insuficiente, interrupciones, ruidos)	Resistencia quemada, válvula averiada, acumulación de cal, termostato defectuoso. En gas, combustión inadecuada o falta de mantenimiento.	Drena sedimentos, revisa termostato, reemplaza piezas defectuosas. Contrata revisión profesional periódica. En gas, servicio técnico especializado.
5. Cisterna que pierde agua o no descarga bien	Juntas o mecanismos viejos o rotos; válvula de descarga defectuosa; exceso de llenado; escapes en juntas.	Ajusta nivel de agua, cambia mecanismos o juntas, revisa la válvula de entrada. Si la base tiene filtraciones, puede requerir obra menor.
6. Humedades, filtraciones o goteras	Roturas en tuberías empotradas, filtraciones por cubierta o tejado, acumulación de condensación, juntas exteriores deterioradas.	Inspección visual, localizar el origen, reparar rotura o sellar zona afectada. En techos cubiertas, impermeabilizar. En interiores, ventilar para reducir condensaciones.

Ejemplos de Málaga / casos locales

En varios barrios costeros de Málaga ciudad, la corrosión acelerada por la brisa marina hace que las tuberías metálicas viejas sean más propensas a fugas y roturas.
En viviendas con bajantes antiguas, los atascos suelen agravarse en época de lluvias, cuando la red de saneamiento municipal tiene mayor carga, provocando reboses.
En zonas con agua dura, los calentadores eléctricos y termos acumulan cal más rápido, reduciendo su eficiencia y provocando ruidos o fallos prematuros.

Mantenimiento preventivo: cómo evitarlos

Revisiones periódicas — chequeos anuales de tuberías, juntas, válvulas y grifería.
Uso adecuado de los desagües — evitar verter grasa, aceites, residuos sólidos y cabello sin filtro.
Limpieza de duchas y aireadores — desarmar y limpiar boquillas, eliminar sedimentos.
Instalar filtros y rejillas — en fregaderos y sumideros para atrapar residuos gruesos.
Atención temprana — no ignorar pequeños goteos, pérdida de presión o manchas en paredes. Una acción rápida cuesta mucho menos que reparar daños mayores.

¿Cuándo llamar a un profesional?

Si la fuga está empotrada en paredes o suelos.
En atascos que ningún desatascador ni remedio casero logra eliminar.
Si hay riesgo de inundación, daño estructural o afectación eléctrica.
Cuando el calentador o termo presenta riesgos de seguridad (gas, escape de vapor, mala combustión).
En humedades persistentes que no desaparecen con ventilación o sellado.